Myanmar: Política fiscal y presupuesto nacionalApellidos  birmanos

Política fiscal y presupuesto nacional en Myanmar

Myanmar, anteriormente conocido como Birmania, es un país del sudeste asiático con una economía en desarrollo que ha experimentado un crecimiento significativo en las últimas décadas. Sin embargo, su sistema fiscal y presupuestario ha enfrentado desafíos y críticas en cuanto a su transparencia, eficiencia y distribución de recursos. En este artículo, analizaremos la política fiscal y el presupuesto nacional de Myanmar, identificando sus principales características, retos y oportunidades.

Contexto económico y fiscal de Myanmar

Myanmar es una economía en transición, que ha experimentado un crecimiento económico sostenido en los últimos años, impulsado por la apertura del país al comercio internacional y la inversión extranjera. Sin embargo, a pesar de este crecimiento, el país sigue enfrentando desafíos significativos en términos de pobreza, desigualdad y desarrollo humano.

En cuanto a su sistema fiscal, Myanmar cuenta con un marco tributario que se basa principalmente en impuestos sobre la renta, el valor añadido y los bienes y servicios. Sin embargo, la recaudación fiscal en el país sigue siendo baja en comparación con otros países de la región, lo que limita la capacidad del gobierno para financiar sus programas y políticas públicas.

Presupuesto nacional de Myanmar

El presupuesto nacional de Myanmar es el instrumento a través del cual el gobierno planifica y gestiona sus ingresos y gastos públicos. El presupuesto se elabora anualmente y se presenta al parlamento para su aprobación, siguiendo un proceso transparente y participativo que garantiza la rendición de cuentas y la transparencia en el uso de los recursos públicos.

El presupuesto de Myanmar se divide en diferentes categorías de gasto, que incluyen gastos corrientes (como salarios y servicios públicos), gastos de capital (como inversión en infraestructuras) y deuda pública. El gobierno también asigna recursos para sectores prioritarios como la educación, la salud y la protección social, con el objetivo de promover el desarrollo humano y reducir la desigualdad en el país.

Retos y oportunidades en la política fiscal de Myanmar

A pesar de los avances en términos de crecimiento económico y desarrollo humano, Myanmar enfrenta desafíos significativos en su política fiscal y presupuestaria. Uno de los principales retos es la baja recaudación fiscal, que limita la capacidad del gobierno para financiar sus programas y políticas públicas. Para abordar este problema, el gobierno ha implementado reformas en su sistema tributario y ha mejorado la administración y la transparencia en la recaudación de impuestos.

Otro desafío importante es la falta de capacidad institucional y técnica en la gestión de las finanzas públicas. Myanmar ha realizado esfuerzos para fortalecer sus instituciones y mejorar la gestión de sus recursos públicos, pero aún enfrenta problemas de corrupción, ineficiencia y falta de transparencia en la asignación de recursos.

Sin embargo, a pesar de estos retos, Myanmar también ofrece oportunidades para mejorar su política fiscal y presupuestaria. La apertura del país al comercio internacional y la inversión extranjera ha generado nuevos ingresos para el gobierno, que pueden ser utilizados para financiar el desarrollo humano y reducir la desigualdad en el país. Además, la participación de la sociedad civil y el sector privado en la elaboración y la vigilancia del presupuesto nacional pueden contribuir a mejorar la transparencia y la eficacia en el uso de los recursos públicos.

Conclusiones

En resumen, la política fiscal y el presupuesto nacional de Myanmar enfrentan desafíos y críticas en términos de transparencia, eficiencia y distribución de recursos. Sin embargo, el país también ofrece oportunidades para mejorar su sistema tributario y la gestión de sus finanzas públicas, con el objetivo de promover el desarrollo humano y reducir la desigualdad en el país. Para lograr estos objetivos, es fundamental fortalecer las instituciones y mejorar la participación de la sociedad civil y el sector privado en la formulación y la supervisión de las políticas públicas en el país.